Luz de vida.

Ya está aquí lo de nosotros. De nuevo, un trío de capilla de categoría conformado por Félix, Nacho y un servidor, aunque faltó nuestro cuarto elemento Archi, recorrimos las calles sevillanas buscando pies y manos sagradas que besar y templos donde oler el humo de Dios -anotemos que en los Terceros hoy el sahumerio exhalaba aromas más próximos a la albahaca que al incienso-.

¡¡¡Aaahhh!!! Maroto, en San Julián no invitáis a café... pero dentro de dos semanas te espero en el Arenal: ¡te vas a empachar de dulces!

Fotografía del gran Nacho Borrallo.